viernes, 22 de marzo de 2013


Crónica #interinosenmarcha 16/03: El último esfuerzo

En esta última noche que nos queda de marcha nos gustaría, como en todo gran viaje, pararnos un momento en las experiencias acumuladas para afrontar esta recta final. No tendría sentido que nos olvidáramos de demasiada buena gente que cree en nuestra causa, que no es otra que la defensa de la Educación Pública, la de tod@s.
Cuando iniciamos esta locura de marcha, que termina mañana mismo, creímos sinceramente que era la única forma de llegar al pueblo mostrándonos tal como somos y pensamos directamente, sin intermediarios ni más siglas que nuestras propias creencias. Nuestra sorpresa es lo que nos hemos encontrado: Un pueblo que nos acoge, nos escucha y con ganas de luchar por su futuro, por el de sus hij@s y de las generaciones que deben levantar un país que está viendo como todas las líneas rojas han sido profanadas en beneficio de un sistema que da la espalda al pueblo y sus necesidades. Este viaje sin dudas es por y para ell@s.
Queremos destacar en esta noche, tal y como se ha hecho en las charlas que hemos compartido en vivo y a través de la red, que en esta lucha que llevamos desde agosto hay algo más que la defensa de nuestro puesto de trabajo, el cual consideramos digno de luchar como el de cualquier trabajador. Nuestra lucha va más allá y es hacer llegar al pueblo la situación que viven sus hij@s, y quien mejor que nosotr@s que tenemos por profesión la comunicación de conocimiento para dar pasos durante los ciento y buen pico de kilómetros que llevamos para contarlo. No está de más recordar que nuestra profesión es la única que forma a personas para este loco mundo en el que deben desenvolverse las nuevas generaciones, aunque se han empeñado en hacernos creer que se lucha por ell@s cuando en la lista de prioridades la deuda es con el sistema y no servir a los ciudadanos por parte de los gobiernos.
Por último, vamos a resumir nuestras ideas y credo, tomando palabras de nuestro acompañante y creyente en nuestra causa, el caminante obrero, que podemos dar un grito si llenáis con aire vuestros pulmones al leer estas líneas dirigidas a cualquier político que pretenda comprender nuestra causa y diga que la defiende sin más que llenar conferencias, columnas de periódicos y programas electorales:
Ustedes no se han enterado que desde el primer ladrillo hasta el último de nuestras escuelas pertenece al pueblo, que el alumnado lo pone el pueblo, que el profesorado también lo pone el pueblo y los salarios del gobierno de la Junta de Andalucía los paga el pueblo. Por tanto, ustedes están obligados a trabajar para el pueblo. Déjense de excusas, porque aquí sencillamente no caben cuando ponen intereses ajenos a nosotros por encima de los nuestros.
No queremos perder la oportunidad de acordarnos de nuestros compañer@s de Madrid que nos mandan su apoyo a través de este comunicado que os dejamos a continuación y que refleja algo que es imparable, el avance de movimientos sociales que vienen a dar respuestas a los problemas de verdad. También en nuestro pensamiento están los compañer@s de Murcia, el valiente encierro en Teruel y todas las acciones de gente que se moja literalmente hasta los huesos para demostrar que cuando las razones van más allá de lo individual y por la sociedad salen adelante; como esta marcha que con la ayuda de personas ha sido posible

CRÓNICA FINAL #interinosenmarcha: 

TRES DÍAS PARA OIR, VER Y REFLEXIONAR


Han pasado ya varios días desde entonces. Los justos y necesarios para dejar a un lado la borrachera del éxito y pensar sobre todo lo acontecido. Los recuerdos se mezclan y hay que ponerlos en orden.

1.La Puebla de Cazalla-Arahal

En La Puebla de Cazalla el día ha amanecido soleado y se espera un sol de justicia. En el lugar de pernocta hay muchos más bultos que otros días. Hay muchos más compañeros y las previsiones para las dos etapas que quedan son más que halagüeñas. Nuestro compañero mira a lo lejos del pabellón. Hoy hay muchos rostros que no le suenan y que no conoce, pero aun así, para dar la bienvenida y presentarse al resto, siguiendo su línea y guardando en el petate los pocos restos de vergüenza que le quedan, alza la voz y dice:
“Hoy y desde aquí hasta nuestra llegada soy melómano y pintor. Perdonad que no cante, que sólo lo recite, pero el tabaco negro de los años de facultad ha rasgado mi voz y no quiero que hoy llueva. Además que mejor manera de comenzar el día que con una canción de La niña de la Puebla, ya que estamos en su tierra”
En los pueblos de mi Andalucía, Los profesen marcha por la madrugá. Se levantan, cogen el petate
y empiezan a andar. Por la educación…
Dicho esto cargamos los coches, la organización es más compleja, necesitamos más coches escoba. Tras unos instantes todo está arreglado y después de un rápido desayuno ponemos pies en polvorosa para no llegar tarde a la salida un día más. Suenan pasos de fondo, el pueblo está en silencio, es como si la Cabalgata de las Walkiras de Wagner estuviera sonando. ¡No, no es música! Son los refuerzos. La alegría se desborda, nuevas presentaciones y tras el visto bueno de la benemérita comenzamos la marcha en dirección hacia El Arahal.
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Aún es temprano, pero somos más visibles que nunca, seguimos a pie de autovía y las señales de apoyo de los conductores se siguen repitiendo igual que ayer. Apenas han pasado dos horas de marcha y hacemos un breve descanso para tomar un refrigerio. Son sólo las once de la mañana y ya hace un sol de justicia que castiga duramente nuestras piernas y hace que nuestras gargantas pidan agua. De esta forma tan rápida hemos visto pasar por nuestras mentes las cuatro Estaciones de Vivaldi. El frío característico el otoño y del invierno, el sol primaveral que nos hace entrar en calor y los rayos tenaces del rubicundo Apolo que nos agota y aplasta contra el suelo.
Nos encomendamos a los Lares y a Selene para que Apolo tenga clemencia con los caminantes. La turba es difícil de controlar, algunos no quieren parar. Es comprensible, la emoción se contagia en el ambiente, pero deben seguir los consejos de los compañeros más experimentados. ¡Sigamos trotando, con paso firme y ordenado! Al unísono la marcha se reanuda, y en los corazones de los veteranos el latir es rítmico, contagios y armónico, entonando en su caminar los acordes de la Marcha Radetzky. El cartel de la autovía nos indica la llegada a nuestro nuevo destino: El Arahal. Esta visión anima el ritmo de las castigadas piernas, unas por el cansancio acumulado de varios días y otras por las agujetas y ampollas por la falta de costumbre. ¡Da igual! Ahora no hay dolor, los pasos van in crescendo como las notas del Bolero de Ravel, para culminar en una explosión de júbilo cuando llegamos al pabellón polideportivo para dejar todos nuestros petates.
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Ya conocemos la dinámica, comida, descanso y charla. Hoy no es ningún colegio, IES o centro cultural. Ni más ni menos que en el Salón de Plenos del Ayuntamiento.
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Una pancarta grande en la que se muestra nuestra realidad preside la sala. Mar Moreno es cómplice del despido de 4502 profesores. Todos los asistentes que van llegando la ven. Se miran desconcertados cuando con la sala llena uno de los asistentes se levanta, da media vuelta y se va. No es de extrañar es un personaje muy cercano a las altas esferas del PSOE, da igual. Es como si hubiese sonado Chopin y su “Marcha fúnebre” para despedir a esta persona. Si no quiere oír la verdad media vuelta y todos en paz. En la charla hay momentos de tensión, se enconan distintos argumentos, se escuchan incluso gritos. No pasa nada, la verborrea de nuestro compañero Ivan, imitando a Leroy Anderson, golpea con su voz las teclas de “La máquina de escribir” para poner paz y llegar a la cordialidad y el entendimiento.
Hay cansancio. Volvemos al polideportivo, unos se duchan, otros se van a cenar. Mientras van llegando más y más compañeros. Es la sinfonía de la unión de los pueblos, es la novena de Beethoven, es la sinfonía de la unión de los docentes de Andalucía en la lucha por la dignidad de la educación y de los puestos de trabajo de 4500 personas. Un día menos para conseguirlo, nos vamos a la cama. Hoy duermen más de sesenta y cinco personas, incluido Pepe, el caminante obrero, quien en la ronda de presentaciones arrancó el aplauso general de todos, tras presentarse diciendo:
“Soy un padre que está aquí para caminar con vosotros y luchar por la educación de mis hijos”.
Buenas noches, buenas noches, buenas noches. Estas dos palabras se oyen por todos los rincones. Hoy hay mucha gente y el recinto es amplio. Hoy no hay frase de despedida, pero nuestro compañero se va a la improvisada cama tarareando en su mente las notas de Verdi, las notas de Aida, las notas de la “Marcha Triunfal”.
(NOTA: Se completará lo antes posible)

1 comentario:

  1. Dificil, veo que teneis una tarea titánica. jeje

    Saludos desde www.malagasensual.blogspot.com

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