miércoles, 5 de junio de 2013

MAREA VERDE DE MÁLAGA CONTRA LA TROIKA

(TEXTO PRESENTADO EL 1 DE JUNIO EN EL AUDITORIO EDUARDO OCÓN DE MÁLAGA DURANTE EL ACTO "LOS PPUEBLOS CONTRA LA TROIKA" CONVOCADO POR EL BLOQUE CRÍTICO DE MÁLAGA)

Como todo el mundo sabe, el lema de marea verde es “por una educación pública de tod@s para tod@s” Esta popular consigna no la entendemos como la defensa de la “escuela pública” actualmente existente. La educación pública que queremos está por hacer. La movilización contra los recortes es una parte de esa lucha más ambiciosa y más profunda y lo mismo vale decir del rechazo a la ley Wert.

Desde Marea Verde hemos insistido en los últimos meses en el peligro de centrar la movilización en la lucha contra la LOMCE, contra el PP, olvidándonos de los recortes…  Esto es grave especialmente en el caso de Andalucía, donde los recortes son aplicados por un gobierno que se autoproclama de izquierdas y en el que participa un partido, IU, que dice aspirar a ser una alternativa de izquierda a la partitocracia. Ese gobierno andaluz intenta desviar la atención hacia la LOMCE para que olvidemos los recortes que aplica y que han supuesto el despido de 4500 enseñantes.

Pero además entendemos que el proyecto de reforma del PP, con todo lo ultraderechista y neocon que es,  no supone una ruptura con lo que venía haciendo el partido socialista: en el fondo, es una vuelta de tuerca más en un proceso  de privatización y mercantilización de la enseñanza que está en marcha desde hace décadas en España y en toda Europa.

Por ello nos parece fundamental insistir en la idea de que la LOMCE y los recortes son dos caras de la misma moneda. La LOMCE es la plasmación jurídica de la escuela que los recortes están produciendo ya en la realidad. La nueva reforma educativa(LOMCE) y los recortes son dos aspectos de un mismo proceso: la mercantilización de la educación. Se trata de una ofensiva  que está  aprovechando la crisis financiera como coartada para vencer las resistencias de  los sectores afectados.
 
Hablando claro: los recortes y la reforma son los instrumentos mediante los cuales se intenta dar un paso adelante definitivo en la sumisión del sistema educativo a los intereses económicos dominantes, los del capital financiero, representados por la odiosa troika.

Esto no es nuevo, pues como ya se dicho, es un proyecto que viene de lejos. Ya en los años 80 el discurso dominante en educación (la vulgata neoliberal) reclamaba, para salir de la crisis,  la reducción de los gastos en educación, y que la formación fuera adecuada a las necesidades económicas (aumentos de la productividad y la competitividad). El objetivo no era ya la cualificación sino la empleabilidad, gracias a las “competencias básicas”. Y a la vez había que liberalizar el mercado educativo mediante privatizaciones, pero también aumentando la descentralización, la diferenciación de centros, la competencia entre ellos…
Este proyecto puede considerarse logrado hace años en algunos países, siendo Inglaterra el modelo. En otros lugares ha avanzado desigualmente dependiendo fundamentalmente de las resistencias que ha encontrado por parte de los sectores afectados.

Recuérdense las revueltas estudiantiles del 86 y el 90 en Francia o, en España, las de huelgas de estudiantes del curso 87 y de enseñantes en el 87 y 88. Pero, desde la LOGSE y su desarrollo normativo, la LOPEG, la LOCE, la LOE, la LAU, la LRU,…, todas las leyes educativas desde los 80 han remado en la misma dirección.
(“el capital humano es un recurso de importancia primordial para el crecimiento económico y el desarrollo de Andalucía. De la cualificación  de sus recursos humanos depende el mantenimiento y el aumento de sus niveles de productividad y, por tanto, su competitividad a largo plazo en la economía globalizada”)

Este párrafo que pone descaradamente la educación al servicio de los intereses económicos no es de la LOMCE sino de la LEA , la ley andaluza que ha propiciado los ROCs más antidemocráticos que hemos tenido, ha creado la Agencia de Evaluación y las Pruebas de Diagnóstico y hecho posible el indigno Plan de Calidad.

Estas transformaciones, ¿en qué dinámica social se inscriben?, ¿cuáles son las fuerzas que las determinan?

Las reformas educativas de las que estamos hablando creemos que tienen su origen en las transformaciones de las relaciones económicas y en la hegemonía del capital financiero y forman parte de ese proceso que ha dado en llamarse “desmantelamiento del Estado del Bienestar” bajo el neoliberalismo. En definitiva se trata de  convertir bienes y servicios de consumo colectivo (socializados), en bienes y servicios de consumo individual, regulado por precios y por la demanda solvente.

Por ello una respuesta adecuada debe ir más allá de la lucha contra los recortes y el rechazo de la LOMCE. Es un error creer a quienes justifican estos cambios con argumentos que se centran en las dinámicas intraeducativas. Es perder el tiempo discutir si sirven y cómo para reducir el fracaso escolar o mejorar los rendimientos escolares.

Marea Verde quiere una alternativa  a la educación actual. Pero esa alternativa no puede ser una educación útil y necesaria a la sociedad actual, sino un proceso articulado con la construcción de otra sociedad. En contraposición  a la LOMCE, la Consejería de Educación ha montado una campaña en la que habla de alternativa educativa o de Plan B. Hay que dejar muy claro que no es de eso de lo que hablamos en Marea Verde.

No es posible avanzar hacia una escuela pública sin un cuestionamiento de los mecanismo que hacen posible la reproducción de la hegemonía del capital: la transferencia masiva de recursos financieros para rescatar a los bancos y la prioridad de pagar la deuda.

 Las Mareas Verdes no deberían limitarse a una lucha sectorial, pues no es posible acabar con los recortes, ni detener la espiral reformista mercantilizadora sin plantear el problema de la deuda, sin negarnos a pagarla, sin, al menos, exigir una auditoría que delimite la legitimidad o no de dicha deuda.

Por eso en Marea Verde, en la medida de nuestras posibilidades y fuerzas, estamos intentando articular luchas a varios niveles: empezamos el mes de mayo contra las Pruebas de Diagnóstico; los interinos se encerraron en un instituto contra la reducción de plantillas; antesdeayer salimos a la calle en defensa de lo público y de los derechos sociales. Y hoy estamos aquí contra la troika, contra el capital financiero.



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